El litigante señaló que la compañía australiana compró en 27 pesos los títulos de los accionistas minoritarios de OHL México, al tiempo que los vendió en más de 40 pesos al accionista de control, es decir, a OHL España.
IFM Investors, accionista de control de Aleatica (antes OHL), anunció una demanda contra el abogado Paulo Díez, por presunto daño moral y solicitó al juez que le ordene “dejar de agraviar a través de declaraciones, bots y una plataforma artificial de investigación de capitales”.
Así lo detalló Alonso Rivera, vocero de IFM, del despacho RGCyK, en un debate que tuvo con Díez en Aristegui en vivo.
Por su parte, Paulo Díez acusó una “estafa bursátil, que le permitió (a IFM) comprar barato en México las acciones de OHL (pagó 27 por acción), y en España pagó más de 47 pesos por acción”.
“El único beneficiario de la contabilidad mágica es IFM... están siendo investigados por una comisión del parlamento australiano”, anotó.
Díez incluso presentó un video en el que asegura que IFM Investors mintió ante el parlamento australiano sobre la compra de Aleática.
“Es una violación flagrante de la ley mexicana que estos señores cometieron con la ayuda y complicidad de varios en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores del peñanietismo, entre los cuales destaca Bryan Lepe, que era el director general de Emisoras, que está denunciado penalmente por mí, y tiene más de 10 denuncias, igual que Aleatica e IFM, ante la Secretaría de Hacienda”, expuso.
En tanto, Rivera afirmó que Paulo sólo intenta “dañar la reputación de mi cliente” e incluso inventó un blog (Aurora Reserch) para ello, lo cual fue negado por Díez Gargari.
Incluso, consideró que “abusa” del derecho de la libertad de expresión, pues ofende e “inventa delitos”.
Rivera consideró que Díez “está enojado porque perdiste un jugosísimo negocio”, en referencia al contrato de 5 mil millones de pesos que ganó Infraiber para el monitoreo de aforos vehiculares en el Estado de México, pero luego fue declarado nulo.
“¿Cuánto dinero has invertido en esta campaña de desprestigio?”, preguntó y lo acusó de tener miles de bots a su servicio.
En su demanda por presunto daño moral, detalló, “no estamos persiguiendo dinero, teniendo derecho, es un tema de principios, defender la reputación de IFM, el que afirma debe probar, no puede ir por la vida imputándole delitos”.
“Mi cliente no está sujeto a juicio aquí, el que está sujeto a juicio es Paulo… no hay ninguna sentencia que diga que es cierto lo que Paulo dice… difama, ofende, calumnia, imputa delitos a sabiendas de que no existe nada”, agregó.
Ve aquí el debate